Todo esto pasó el puente de febrero, en la Ciudad de Oaxaca, mi consentida.
Este fin tocaba celebrar que Pepe y Monch se casaban. No llevé mi cámara a la boda para poder disfrutar en paz y no perderme de ningún momento. Como en esta escena de Walter Mitty, creo que a veces es mejor estar ahí y nada más. Ahora que lo pienso, aunque la hubiera llevado, no me habría podido concentrar en tomar fotos. Cuando vi llegar a Monch a la iglesia, en su vestido blanco, con su papá en un brazo, me quedé petrificado.
Para compensar, le tomé fotos a una novia en la calle. Si la conoces, mándele esta Fotocrónica para que se vea en el blog de un completo desconocido ? .
Además de novias, me encontré estas otras escenas entre paredes de colores y graffitis político-sociales.
El primer día fuimos al Jardín Etnobotánico de Oaxaca, justo atrás de la iglesia de Santo Domingo. Tomamos un tour en el que la verdad no puse mucha atención pero logré escuchar que habían miles de especies por doquier. Mejor le tomé fotos a la gente bonita con la que iba.
Aquí mismo le intenté tomar una foto a una de mis parejas favoritas, Tamarindo y Mollete, pero no salió tan bien. No importa porque no les quita lo cool y los tipazos que son. (Ya había acabado de escribir este post y cuando lo volví a leer por última vez se me ocurrió ponerle nombre a la parejaza, y mis opciones son: Mollerindo o Tamallete. ¿Cuál te late más?)
De ahí fuimos a comer a mi lugar favorito de Oaxaca, La Biznaga. Me lo recomendó una vez mi tía Lupita y no me lo pienso perder cada vez que vuelva. Nos dimos un verdadero festín y comimos delicioso, como es costumbre ahí. Mucho quesillo, chapulines, mezcal y cerveza mexicana.
Fuimos al Museo de la Filatelia, donde hay miles de cartas, postales y cositas oaxaqueñas. El edificio me gusta un buen porque tiene una parte abierta súper bonita, con unas bancas y un columpio. Te debo la foto del columpio pero aquí van algunas.
También fuimos al Centro Académico y Cultural San Pablo, y está re chulo.
Por último, nos dimos una vuelta a Monte Albán, Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO. Espero que a mi compadre Bernardo García López no le moleste que haya subido una foto de su licencia para conducir.
¡Pasumecha! Ya se alargó de más esta Fotocrónica, aguanta tantito más.
Por último, dos más para cerrar con broche de oro. Creo que son mis favoritas, no sé por qué.
¡Ah! Casi se me olvida. En este viaje tomé 59 fotos y me quedé con 33.
El otro día estaba repasando las fotos que he estado tomando últimamente y por lo que pude ver, cada vez le tomo menos a lugares y más a gente en lugares. David Alan Harvey dijo que no hay que tomarle foto a como se ve un lugar, sino como se siente. Y creo que está padre eso.
Y aquí concluimos. Qué gusto me da hacer estas Fotocrónicas. Como que revivo momentos y me acuerdo de cosas padres cuando te cuento lo que pasó. Ojalá la hayas disfrutado.
Abrazo oaxaqueño,
Fon.
P.S: Una disculpa a mi primazo Felipón por tardarme una hora más en publicar este post. Espero que tu clase te sea leve.